21 septiembre 2022

 ¿QUÉ HACER SI ENCUENTRA CARACOLES AFRICANOS?

• Los caracoles africanos poseen una concha que puede llegar a medir 12 centímetros de largo y 6 de diámetro.

• Pueden transmitir parásitos y bacterias que podrían causar enfermedades a distintas especies animales y a los seres humanos.
• Acaban con cultivos completos, desplazan especies nativas y afectan los ecosistemas.

El caracol africano es una de las 100 especies invasoras más dañinas del mundo, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y tiene en alerta a los municipios del Tolima debido a su alta presencia y las posibles consecuencias que puede provocar en la salud de los humanos, así como en la afectación de los ecosistemas.

Actualmente, la Corporación Autónoma Regional del Tolima, hace un llamado a la comunidad para poder controlar a esta especie y recomienda que al hacer jornadas de recolección se contemplen las siguientes medidas:

  • No tocar ni manipular al caracol con las manos desprotegidas, sino con guantes.
  • Tomar las medidas adecuadas de protección para su recolección.
  • Disponer de bolsas gruesas para depositarlos.
  • Preparar cal viva para su disposición final.
  • Mantener jardines, pastos y parques podados.
  • Lavar con agua potable los alimentos antes del consumo.

Si usted se encuentra en zona rural, debe proceder a hacer el enterramiento de la bolsa con cal viva donde fueron depositados y si está en zona urbana, pueden acercarlos a las instalaciones de Cortolima para que personal idóneo proceda a su disposición final.

Acerca del caracol africano: “Los caracoles africanos son un molusco potencialmente transmisor de enfermedades a seres humanos y animales domésticos. También ocasiona un desequilibrio en nuestra biodiversidad, adaptándose a cualquier clima, reproduciéndose en grandes cantidades” afirmó Mauricio Jaramillo Tamayo, profesional universitario de la Subdirección de Administración de Recursos Naturales de Cortolima.

“No se han encontrado reportes en municipios altos, ahí todavía no tenemos distribución, ni se nos presenta como problemática. Básicamente los encontramos en todos los municipios de la rivera del Magdalena y los que por temperatura y humedad se enmarcan dentro de las preferencias del caracol”, puntualizó Jaramillo Tamayo.