Cinco cosas que debes saber de la Conferencia sobre los
Océanos, la oportunidad para salvar el mayor ecosistema de la Tierra
1 Junio 2022
Cambio climático y medioambiente
La reunión está pensada como un espacio
para que la comunidad internacional impulse la adopción de medidas con base
científica que permitan la gestión sostenible de los océanos, entre ellas
la lucha contra la acidificación del agua, la contaminación, la pesca ilegal y
la pérdida de hábitats y biodiversidad.
Los océanos son el mayor ecosistema de
la Tierra. Estas extensas masas de agua regulan el clima y dan de comer a miles
de millones de personas, pero su salud está en peligro. La segunda Conferencia de las Naciones Unidas
sobre los Océanos, que se celebrará a finales de junio, representa
una importante oportunidad para reparar los daños que la humanidad sigue
infligiendo a la vida marina y a sus medios de subsistencia.
El objetivo de este evento, que tendrá
lugar entre el 27 de junio y el 1 de julio, es marcar una nueva era en relación
con los océanos. Para ello, contará con la presencia de delegados de los
Estados miembros, organizaciones no gubernamentales y universidades, así como
de empresarios que buscarán formas de hacer crecer de forma sostenible la
denominada "economía azul".
Noticias ONU ha preparado estos apuntes
como guía de esta importante reunión.
Banco de imágenes oceánicas/Brook Peters - Peces nadando en un arrecife de coral del Mar Rojo.
1. Ha llegado la hora de centrarse en
las soluciones
La primera Conferencia de la ONU sobre
océanos, celebrada en 2017, se consideró como un punto de inflexión que sirvió
para alertar al mundo sobre los problemas a los que se enfrentan los océanos.
En palabras del enviado especial del Secretario
General de la ONU para los océanos, Peter Thomson, en Lisboa
"se tratará de aportar soluciones a esos problemas".
El evento está pensado como un espacio
para que la comunidad internacional impulse la adopción de medidas innovadoras
y con base científica que permitan la gestión sostenible de los océanos,
entre ellas la lucha contra la acidificación del agua, la contaminación, la
pesca ilegal y la pérdida de hábitats y biodiversidad.
La conferencia también determinará el
grado de ambición en la aplicación del Decenio de las Naciones Unidas de las Ciencias
Oceánicas para el Desarrollo Sostenible (2021-2030). El Decenio
será uno de los temas principales de la conferencia y protagonizará varios
actos importantes, en los que se aspira a conseguir unos océanos más sanos y
sostenibles.
La Agenda 2030 para el Desarrollo
Sostenible, el proyecto de la Organización para que las personas y el planeta
cuenten con un futuro más justo, fijó diez objetivos relacionados con los
océanos que deben alcanzarse a lo largo de esta década. Entre ellos se incluyen
las acciones para prevenir y reducir la contaminación y la acidificación de los
mares, lograr la protección los ecosistemas, regular la pesca y aumentar los
conocimientos científicos. Los diálogos interactivos de la conferencia se
centrarán en cómo abordar muchas de estas cuestiones.
La juventud también contará con un
destacado papel durante el encuentro. En Lisboa se contará con la participación
de jóvenes emprendedores que están buscando soluciones innovadoras para los
problemas más acuciantes a los que se enfrentan los océanos.
Del 24 al 26 de junio participarán en el
Foro de la Juventud y la Innovación, una plataforma destinada a ampliar las
iniciativas, proyectos e ideas de los jóvenes emprendedores e innovadores,
ofreciéndoles formación profesional y poniéndoles en contacto con mentores,
inversores, representantes del sector privado y funcionarios públicos.
El foro incluirá un
"Innovathon", una maratón de innovación que reunirá a grupos de cinco
personas que trabajarán juntos para crear y proponer nuevas soluciones para la
conservación de los océanos.
2. Hay mucho en juego
Los océanos son una fuente continua de
oxígeno, sustento y alimentos. Nutren a una cantidad inimaginable de
biodiversidad y apoyan directamente al bienestar humano, a través de múltiples
recursos alimentarios y energéticos.
Además de ser una fuente de vida, el
océano estabiliza el clima y acumula carbono, actuando como un gigantesco
sumidero de gases de efecto invernadero.
Según las cifras que baraja la ONU,
cerca de 680 millones de personas viven en zonas costeras de baja altitud, una
cifra que aumentará a unos mil millones en 2050.
Además, los últimos análisis estiman que
las actividades industriales basadas en el uso de los océanos emplearán a 40
millones de personas a finales de esta década.
PNUD/Amunga Eshuchi - Un pescador local en Kenia que depende del pescado para alimentarse y ganarse la vida.
3. El punto de mira se centra en Kenia y
Portugal
Aunque la Conferencia se celebra en
Portugal, el evento está coorganizado por Kenia donde el 65% de personas que
habita en la costa reside en zonas rurales y sus principales medios de vida son
la pesca, la agricultura y la minería.
Para Bernadette Loloju, una residente en
el condado keniano de Samburu, el océano es importante porque les permite
obtener muchos de los bienes que necesitan. "El océano contiene muchos
organismos vivos, incluyendo peces. También nos proporciona alimentos. Cuando
vamos a la ciudad de Mombasa, disfrutamos de la playa y nos bañamos, lo que
aumenta nuestra felicidad".
La ganadora del premio Joven Campeón de
la Tierra del Programa de las
Naciones Unidas para el Medio Ambiente, Nzambi Matee, tiene el mismo
punto de vista. Nzambi vive en Nairobi, Kenia, y es la fundadora de Gjenge
Makers, una compañía que produce materiales de construcción sostenibles y de
bajo coste fabricados con residuos plásticos reciclados.
Matee aprovecha la basura plástica
colectada por los pescadores en el mar y la convierte en ladrillos para la
construcción: "mi trabajo de reciclaje de residuos plásticos me ha
permitido emplear a más de 113 jóvenes y mujeres, que en total han producido
300.000 ladrillos. Me gano la vida con el océano, y por tanto el océano es mi
vida", señaló.
La misma pasión por el océano la
comparte Portugal, el Estado miembro de la Unión Europea con mayor extensión
costera, unos cuatro millones de kilómetros de costa continua, y como tal, un
país que desempeña un papel central en la cuenca atlántica.
"Nuestras expectativas para la
Conferencia de la ONU sobre los Océanos pasan por que sea una conferencia
centrada en la acción y no sólo en el compromiso”, afirma Catarina Grilo,
directora de conservación y políticas de la Associação Natureza Portugal, una
organización no gubernamental que trabaja juntamente con el Fondo Mundial para
la Naturaleza.
La Asociación dirige varios
proyectos en los ámbitos de la protección marina, la pesca sostenible y la
conservación de los océanos.
"La anterior conferencia en Nueva
York fue un buen momento para concienciar sobre el papel de los océanos en el
bienestar humano. En aquel entonces conseguimos muchos compromisos voluntarios
de los Estados miembros y de las organizaciones no estatales, pero ahora es el
momento de pasar de las palabras a los hechos".
Unsplash/Tamas Tuzes-Katai - La playa de Nazaré en Portugal.
4. Los océanos y el clima del planeta
tienen una relación intrínseca
Los océanos y el clima terrestre están
estrechamente interconectados entre sí de múltiples modos. A medida que la
crisis climática sigue representando una amenaza existencial, aparecen algunas
mediciones clave que los científicos vigilan de cerca.
Según el último informe sobre el cambio
climático de la Organización
Meteorológica Mundial, el aumento medio anual del nivel del mar en
todo el mundo fue de 4,5 mm entre 2013 y 2021. Este fenómeno se produjo a causa
del creciente derretimiento de las capas de hielo del planeta.
Los océanos absorben cerca del 23% del
CO2 generado por las actividades humanas, y a consecuencia de ello se producen
reacciones químicas que acidifican el agua del mar. Este fenómeno pone en
peligro los ecosistemas marinos ya que, a mayor acidez del agua, menor es la
capacidad de absorción de CO2.
El director de proyectos de la Fundación
Océano Azul, Samuel Collins, cree que la conferencia servirá de puente hacia la
COP27, el mayor encuentro sobre cambio climático de la ONU que se celebrará el
próximo mes de noviembre en Sharm El-Sheikh (Egipto).
"Los océanos representan un
elemento básico para el clima. Albergan el 94% del espacio vital del planeta.
Podría recitar estadísticas impactantes para todos nosotros", afirma este
escocés de 27 años.
"La razón por la que los productos
que compramos en la tienda son tan baratos es porque el transporte marítimo
moviliza el 90% de los artículos que encontramos en nuestros hogares, por lo
tanto, existen múltiples razones por las que estamos conectados al océano,
tanto si vives en un país con salida al mar como si no. No hay organismo vivo
en la tierra que no esté relacionado con el océano".
5. ¿Qué puedes hacer para ayudar?
A la espera de la respuesta activa de los
responsables y los líderes mundiales, les preguntamos a algunos expertos —entre
ellos Catarina Grilo y el biólogo Nuno Barros, así como a Sam Collins— qué
pueden hacer los ciudadanos para fomentar una economía azul sostenible. A
continuación, les presentamos algunas ideas que pueden incorporar a sus vidas
cotidianas:
Si come pescado, diversifique su dieta y
no coma siempre la misma especie de marisco. Evite también el consumo de los
principales depredadores y asegúrese de que la comida procede de fuentes responsables.
Dado que el 80% de la contaminación
marina se origina en tierra, ponga de su parte para evitar que la polución por
productos plásticos llegue al mar. Puede ayudar utilizando productos
reutilizables, evitando usar productos desechables y asegurándose de depositar
los residuos en los contenedores adecuados.
No tire basura en la playa y recójala.
Piense también que cualquier medida que pueda tomar para reducir su huella
medioambiental ayudará de forma indirecta a los océanos.
Siga reivindicando soluciones, tanto en la calle como escribiendo cartas a los responsables de la toma de decisiones, firmando peticiones o apoyando campañas destinadas a convencer a los responsables de adoptar medidas, ya sea a nivel nacional como mundial.